Ñuñoa Poniente
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Descripción General
Contenidos de la Ruta
Historia del Barrio
El nombre de esta comuna deriva del vocablo ñuñohue, que en mapudungun significa “lugar de ñuños”. El ñuño era una flor amarilla, típica de la zona. En este sector vivían pueblos indígenas de gobernancia incaica, los cuales se dedicaban al cultivo agrícola, y que se cuenta, tenían su asentamiento principal en los terrenos de Plaza Ñuñoa.
Al llegar los españoles, la zona estaba a cargo de los caciques Longomavico y Aponchonique. Pedro de Valdivia, al ver la riqueza de las tierras tras su llegada en 1540 (su gran belleza, fertilidad, y la existencia de canales de regadío implementados por los indígenas), lo vio como un sector apetecible para instalarse. De este modo, se comienza a subdividir la tierra, a través de la imposición un sistema de encomienda y una repartición de chacras, entre las que destacan las de Macul, Ñuñoa, Tobalahue, Apokintu y Butacura, precursoras de áreas territoriales hoy existentes. Es así como los indígenas originarios “desaparecen” (al menos en la historia) con la instalación de haciendas de colonos españoles.
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Durante la colonia (siglos XVI y XVII), Ñuñoa era una serie de propiedades agrícolas, dedicadas al cultivo de verduras, frutas, hortalizas y viñedos, cuyos caminos naturales y callejones posteriormente dieron origen al trazado vial que se extendió al comenzar a urbanizarse el sector. En el siglo XVIII se crea el camino Ñuñohue para unir las haciendas, generando lo que sería la precursora de la actual Avenida Irarrázaval, creada en el siglo XIX.
Obtenida la independencia, la capital comienza a extenderse hacia la cordillera, hecho que queda en los registros administrativos cuando el 1891 se crea la Municipalidad (y posteriormente la comuna) de Ñuñoa, por iniciativa del político conservador, parlamentario y ministro; José Manuel Irarrázaval, a quien se debe el nombre de la avenida principal de la comuna. La municipalidad nace con subdelegaciones; Las Condes, Providencia, Santa Rosa, Subercaseaux, etc.
Comienzan a reducirse así las áreas de cultivo y a incrementarse progresivamente las urbanizaciones, sumado al loteo de grandes y pequeñas propiedades, para formar poblaciones con proyecciones urbanas.
En 1963 comienza la creación del Municipio de La Reina, Macul, Peñalolen (entre otras), hasta quedar la zona que actualmente comprende. Importantes instituciones se cobijan al interior de la comuna, tales como el Instituto Pedagógico, los desaparecidos Campos de Sport, el Estadio Nacional, el Complejo Habitacional EMPART, la Villa Olímpica y la Población de Suboficiales de Caballería, entre otros.
Hasta 1970 albergó a la clase alta y media intelectual de la ciudad, destacando por su tejido social, sus plazas y parques (como el Juan XXII, la plaza Enrique Bunster o la ya mítica Plaza Ñuñoa) parte fundamental de su característica “vida de barrio”.
Durante la dictadura, varios de sus espacios y casonas fueron utilizados como centro de detención y tortura por los organismos de inteligencia (DINA, CNI), como el Estadio Nacional o la Casona José Domingo Cañas. Estos al día de hoy son recordados y preservados como sitios de memoria.
Desde los 2000, ha vivido un fuerte cambio demográfico debido a la compra indiscriminada de terrenos y casonas por parte de inmobiliarias (lo que ha significado pérdida de importante patrimonio arquitectónico), lo que sumado a modificaciones de planes reguladores, ha generado cordones de alta densificación en sus principales avenidas, con enormes edificios de altura.
Época y/o horario adecuado
Se puede ir en cualquier época del año pues es un espacio público, abierto, sin restricción horaria. Es un barrio residencial, por lo que es muy tranquilo, sin embargo varios de los lugares señalados en ruta tienen horario diurno (o solicitan realizar una reserva previa en caso de querer un tour), por lo que se recomienda realizar la ruta durante el día.
Acceso
En vehículo propio
Se puede estacionar en las calles pequeñas del mismo sector.
En transporte público y autostop
Se recomienda realizar esta ruta a pie. En transporte público, se puede tomar cualquier bus de RED que transite por Avenida Irarrázaval, o se puede tomar metro, y bajar en la estación Monseñor Eyzaguirre (L6), frente al Teatro Municipal de Ñuñoa.
Descripción de la ruta
Estación 1: Teatro Municipal de Ñuñoa - Ex Cine California
Estación 2: Barrio Elías de la Cruz
Ubicado entre Capitán Fuentes, Dublé Almeyda, José Manuel Infante y José Domingo Cañas, surge el año 1828, cuando la Caja de Ahorro de Empleados Públicos levantó un conjunto residencial -Zona de Conservación Histórica desde 1989- diseñado por los arquitectos Wenceslao Cousiño y Teobaldo Brugnoli, y cuyo nombre se debe a un destacado jurista y Ministro de la Corte Suprema.
Posee una plaza central de forma oval, que recibe el nombre del periodista y escritor Enrique Bunster. En esta plaza cual convergen las cinco pequeñas calles del barrio, generando un pequeño oasis en la mitad de la comuna. Este lugar es el epicentro de vida comunitaria de los vecinos del conjunto residencial, el cual contiene 85 casas, todas pareadas, con fachadas uniformes en albañilería de ladrillo, y antejardin, lo que genera un ambiente de barrio “tradicional” y de una escala mucho más amable para quien lo recorre.
Estación 3: Casa Memoria José Domingo Cañas
Estación 4: Barrio Suárez Mujica
Estación 5: Estadio Nacional
Estación 6: Villa Olímpica
Estación 7: Conjunto EMPART
Recomendaciones y posible extensión de la ruta
Bibliografía y Agradecimientos
Bibliografía Utilizada: