1961
ediciones
Cambios
→Estación 1: Plaza de Armas
{{dato|En 1787 la cantidad de personas que concurría a la Plaza era tanta, que el Cabildo se reunió el 10 de septiembre de ese año para tratar el remedio que podía darse para solucionar "''el desgreño y desórdenes que ocasiona el mismo concurso y atropellamiento de gentes de todas clases''"}}
A inicios del siglo XIX cambió de identidad —mediante decreto, en 1825 pasó de llamarse Plaza Mayor a Plaza de la Independencia— y comenzó a ''aggiornarse''. El empedramiento se dispuso en 1835, además de la modificación del trazado y de las actividades que se generaban en torno a ella. El año 1873 el Intendente '''Benjamín Vicuña Mackenna''' ordenó instalar jardines y árboles. Dos décadas después, en 1896, el paisajista francés '''Guillermo Renner''' implementó una profunda remodelación. Diseñó un jardín de araucarias, cedros, ceibos, encinas y pataguas, y modificó la configuración del ágora central en base a los preceptos arquitectónicos europeos. Esto, junto a la creación de portales y paseos comerciales, y a la instalación de luminarias de gas carbónico, consolidaron el lugar como paseo para la sociedad de la época.
Muchos años después, ya iniciando el siglo XXI, una polémica renovación a cargo de la oficina de '''Rodrigo Pérez de Arce''' dio origen a la actual plaza. El rediseño combinó sectores de explanada en los costados norte y poniente, pensados para la realización de actividades culturales, con una pérgola central para la ejecución musical de la banda municipal. Si bien criticada, la intervención es muy interesante. Formalizó la coexistencia de las dos tipologías de plaza que venían manifestándose hasta el momento: la explanada abierta, herencia española; y la plaza arbolada, tomada del mundo británico. En 2014 la plaza fue cerrada para otra cirugía más, que agregó un 40% más de áreas verdes, 30% más de árboles, nuevas luminarias y cámaras de vigilancia.