Cambios

[[File:13ROMANO_6.png|miniaturadeimagen|Aviso cartelera semanal|200px300px]]

Tras el terremoto de 1960 y la puesta en marcha de un nuevo Plan Regulador, la ciudad de Concepción se vio invadida de una serie de edificaciones en altura que siguieron seguían el formato de una plataforma comercial de uno o dos pisos (, en su mayoría conformada conformados por una galería comercial). En la esquina de Barros Arana con Colo Colo, se proyectó un edificio uno de los edificios que siguió esa línea, proyecto de los arquitectos Gabriela González, Pedro Tagle y Ernesto Vilches.

La galería comercial proyectada en la placa del edificio se concibió con un cine que siguió el formato subterráneo, : el Cine Romano. Tal como ocurrió con el Cine Regina, este cine tuvo una su capacidad limitada era modesta pero su ubicación privilegiada lo hizo . Se volvió uno de los más populares entre las décadas de 1960 y 1990, a pesar de ser vecino inmediato del Cine Ducal. Mientras muchas salas cayeron entre 1970 y 1990, el Romano se mantuvo con funciones y con proyecciones de estrenos hasta los albores del siglo XXI, cuando cerró . Cerró por un tiempo hasta volver y volvió brevemente con algunas proyecciones. Nuevamente De nuevo cerró y la sala fue utilizada por una secta con fines de culto. Al cabo de unos años una iniciativa denominada Teatro Romano le devolvió el carácter de sala de espectáculos pero tampoco fue duraderaaprobó con distinción el paso del tiempo. Actualmente el cine se transformó en Hoy es una sala de eventos.