1961
ediciones
Cambios
→Estación 1: Calle Veintiuno de Mayo
{{Indexada}}
{{RutaForm
|CiudadesChile=Santiago
|BellezaEscenica=Atractiva
|Atractivos=Arquitectura interesante, Gastronomía llamativa, Parque(s), Hito(s) histórico(s)
|Duracion=3 horas
|Distancia=1350
|MetrosDescenso=11
|Primer Autor=[[usuario:MariaJoseSepulveda|María José Sepúlveda Páez]]
|Imágen Principal=Brasil GetLostMagazineMapocho_FotoPrincipal.jpg|ComentariosImagen=Imagen de murales del barrio, Get Lost MagazineAcceso principal al Mercado Central.
|KMLZ=Ruta Mapocho.kml
|TipoDeMap=HYBRID
}}
[[File:Mapocho_Colonia.jpg|thumb|Imagen de Mapocho Colonial; vista hacia Puente Cal y Canto y Tajamares.]]
[[File:PuentePalo_Mapocho1870.jpg|thumb|Puente de Palos sobre el río, alrededor de 1870. Fuente: EnTerreno]]
[[File:Canalización1880.jpg|thumb|Trabajos de canalización del río, por 1880. Fuente: EnTerreno]]
[[File:VistaMapocho(desdeestación)1919.jpg|thumb|Vista del Barrio desde la Estación, alrededor de 1920.]]
[[File:BarrioMapocho1920_ArchivoChilectra.jpg|thumb|Vista del Barrio Mapocho hacia 1920. Fuente: Archivo Chilectra]]
[[File:Mapocho1930.jpg|thumb|Vista desde la Estación Mapocho hacia el oriente, en 1930. Fuente: EnTerreno]]
==Descripción General==
El Mapocho es, además de un barrio histórico con calles que se remontan a épocas coloniales, un '''espacio clave de la cultura popular''' de la ciudad. Los límites del barrio no son precisos y hay distintas posturas al respecto. Acá se definió como el sector ubicado entre [[Plaza de Armas]] y Avenida Santa María. Hacia el lado sur del Mapocho confluye un menjunje de edificios históricos, establecimientos de entretenimiento popular, tiendas y comercio ambulante.
==Contenidos de la Ruta==
Lo que sigue es la historia de uno de los barrios más importantes de la cultura popular capitalina. Barrio arrabalero, suele ser pasado por alto, sin embargo guarda una rica tradición, como espacio de refugio de los migrantes del campo a la ciudad, portadores de nuevas costumbres y nuevas formas de habitar la urbe. Estos rasgos han dejado su legado hasta hoy y viven en sus habitantes: las dinámicas del mercado y las relaciones que se forman en torno a este, las ferias y puestos callejeros, los vendedores ambulantes, y los vecinos, quienes conviven en un colorido y vivaz caos.
==Historia del Barrio==
El territorio del Mapocho trasciende a épocas pre-coloniales, ya que formaba parte del '''Camino del Inca'''.
Durante el siglo XVI, se establecieron '''guangualíes''', poblaciones de indios y mestizos, quienes establecieron sus ranchos y talleres en el cauce del Mapocho. Fueron los primeros asentamientos en las riberas del río, espontáneos y sin regulación. Con el pasar del tiempo estos se masificaron pese a la persecución de las autoridades, para quienes tales comunidades no eran dignas del lugar y las declararon ilegales.
Durante siglos XVIII y XIX, los mismos vecinos construyeron al sur del río calles situadas en las rampas de acceso y salida de los puentes de Cal y Canto, especialmente la vía de las Ramadas -hoy calle Esmeralda-, calle Puente y calle Sama -hoy General Mackenna-. Durante 1820, las autoridades destruyeron la mayoría de los ranchos construidos en las riberas, trasladando de forma masiva a los pobres al sur y poniente de la ciudad.
{{Puente Cal y Canto}}
En paralelo, en las riberas del río se constituyeron espacios de intercambio comercial. En parte, por los diversos molinos que se construyeron en sus orillas. Más importante, por la '''Plaza de Abastos''', donde se concentraban los vendedores ambulantes y tenderos, y por la ''Vega del Mapocho''. Estos dos espacios comerciales abastecían de alimentos a la ciudad, y en ellos convergían bodegueros, carretilleros, mercaderes y consumidores. Esto propició el desarrollo de locales comerciales en sus calles. Como la calle Puente, así llamada porque conducía al Puente Cal y Canto, que se especializaba en talabarterías (trabajo en cuero).
{{cita|En la parte del río que defendían los pretiles o tajamares, estaba la Plaza de Abastos o Mercado, que consistía en un cuadrado de edificios bajos construidos en la misma disposición sencilla que todo el resto de los edificios viejos de Santiago. Allí se vendía carne, legumbres, pescado y todos los artículos de alimentación. También se cocinaban y expendían, en medio del humo y del olor penetrante de la grasa derretida, los picarones, sopaipillas y empanadas fritas. Los puestos de mote y huesillos, de empanadas caldeas y de tortillas de rescoldo, alternaban con la venta de pajaritos vivos, jilgueros, tordos, y de frutas frescas y secas, todo en grande, pintoresca y sabrosa variedad”|'''Ramón Subercaseux''', sobre sus recuerdos de infancia hacia 1860.}}
De acuerdo con el intendente '''Benjamín Vicuña Mackenna''', el sector ''siempre fue plebeyo''. Decía que mantuvo un desarrollo autónomo del resto de la ciudad, marcado fuertemente por los riesgos del río sin canalizar y por la apropiación de ''lo popular'' como elemento que definía a los habitantes, de forma antagónica a los aristócratas. A inicios del siglo XIX, comenzaron a aumentar las viviendas y el hacinamiento, así como ramadas, almacenes, bares y prostíbulos. Surgieron también, pese a la alta tasa de analfabetismo, imprentas y talleres tipográficos donde se publicaban periódicos.
En 1872, Vicuña Mackenna propuso su proyecto de ''Transformación de Santiago''. Uno de los principales puntos era la '''canalización del río''' con el objetivo de generar una sola ciudad, incluyendo al relegado sector del Mapocho. Mackenna creía que existían dos ciudades: la ciudad propia de la gente de bien, opulenta, ilustrada y cristiana, y la ciudad bárbara de los arrabales. Este proyecto ponía en valor el poder ''civilizatorio'' del espacio público, creando nuevas calles, estaciones ferroviarias y un nuevo paseo público donde yacían los basurales del lecho del río. Tras un incendio que afectó la Plaza de Abastos esta se clausuró, y se erigió en su lugar el '''Mercado Central''' a fin de rehabilitar el sector y de regular el comercio.
Para desembocar en esta ciudad única se requería de mejores puentes. De este modo emergió el sacrilegio: cuestionar la idoneidad del viejo y vapuleado Cal y Canto. Además de deteriorado carecía de anchura suficiente, y formaba un dique que retenía las aguas y propiciaba inundaciones.
Hacia mediados de siglo la migración campo ciudad -que trajo numerosos peones y sus familias, en situación de pobreza- y una serie de epidemias impulsaron reformas sanitarias. Se definió finalmente la canalización del Mapocho, con el objetivo de transformar una zona “pestilente y sucia” en un paseo atractivo y salubre. En 1857 se aprobó la ley que autorizó la canalización, pero era muy oneroso y hubo que esperar. De las obras públicas planteadas por Vicuña Mackenna e 1872 era quizás la más cara y tampoco se abordó de inmediato. Recién en 1888, con los ingentes ingresos salitreros generados por las tierras capturadas en la Guerra del Pacífico, comenzaron las obras. El diseño se basó en el proyecto del ingeniero '''Valentín Martínez'''. Fue la lápida definitiva para el maltrecho puente Cal y Canto. El barrio abandonó sus ropajes coloniales a cambio de otros modernos: se buscaba crear un “nuevo barrio”, a la altura de los mejores barrios de París y Londres. Habría alcantarillado, se expropiarían los terrenos de las riberas donde existían viviendas populares, y se pondría punto final a los basurales.
A esto se sumó el desarrollo de vías de tranvías y el advenimiento del ferrocarril urbano, con núcleos en torno al mercado. En 1880, se añadió al mercado una línea férrea circunvalatoria, que conectaba este espacio con el resto de la ciudad. En 1890 se erigieron tres puentes metálicos a lo largo del río, de modo que el puente “de los Carros” quedó como conector entre el lado sur y norte del río, y aumentó aún más el tráfico del sector. Eran habituales los desórdenes y escándalos callejeros, ya que existían no menos de 20 hoteles parejeros o ''cafes chinos'', asociados al comercio sexual y regentados habitualmente por asiáticos, origen del nombre. La prostitución en el sector alcanzó proporciones enormes para la época, junto a las cantinas clandestinas.
Finalmente, la inauguración de la '''Estación Mapocho''' en 1912, propició la última explosión de bares, hoteles y boliches. Medraban también restaurantes, ''boîtes'', cafés, salones de baile, cabarets y fuentes de soda. En las calles abundaba el comercio de sopaipillas, tortillas, huevos duros y pan amasado hasta la madrugada. Un sinnúmero de artistas, pintores, poetas y literatos reconocidos pasaron por estos lugares: ''Neruda, Plath, Paschín, de La Vega, Recabarren, Rojas Jiménez, Nicómedes Guzmán, de Rokha, Mundt''' y tantos otros, que compartieron espacios con maleantes, cuidadores de carros, copetineras y prostitutas.
Desde mediados del siglo XX no se registraron mayores cambios en el barrio, y en dictadura no hubo mayor inversión pública. El barrio se "pacificó" debido a las fuertes regulaciones de las autoridades, lo que en conjunto con los toques de queda provocó que bares y antros recreativos se extinguieran durante los ‘80 y ‘90. Sin embargo, aún prevalece el imaginario y el carácter popular, así como unos pocos bares sobrevivientes que han mantenido sus tradiciones.
==Época y/o horario adecuado==
Se puede ir en cualquier época del año pues es un espacio público, abierto, sin restricción horaria. Se recomienda visitar de día, desde las 10, cuando todos los lugares abiertos a público. De noche el área es algo delicada, con una tasa no despreciable de hurtos, pero no impedimento para empinar unas copas en La Piojera.
{{salto}}
==Acceso==
===En vehículo propio===
===En transporte público y autostop===
En sus orígenes coloniales fue llamada la ''Calle de la Pescadería'Buses', ya que los jueves los mercaderes se instalaban a vender productos del mar. Posteriormente pasó a llamarse ''Calle de la Caridad'', debido a la construcción del Cementerio de la Caridad, donde eran enterrados los reos fallecidos.
Su actual nombre tiene homenajea el '''Combate Naval de Iquique''', ocurrido el 21 de Mayo de 1879, durante la Guerra del Pacífico, en el que murió en forma heroica Arturo Prat. {{dato|los cinco buques del Combate Naval de Iquique eran:*'''C'''ovadonga*'''H'''uáscar*'''I'''ndependencia*'''L'''amar*'''E'''smeralda Juntos, forman la palabra CHILE}} * '''Calle de las Lanas'''El triángulo conformado por las calles 21 de Mayo y Diagonal Cervantes es un tradicional núcleo de lanerías y cordonerías. No solo acuden los santiaguinos, sino también habitantes de regiones por su gran variedad y precios. Se puede adquirir lanas de distintos tipos y artículos para el bordado y costura, así como círculos de tejido y talleres. En fin, carretes para el mundo. El año 2016 los locatarios fueron informados que tendrían que desalojar antes de fin de año para dar paso a la construcción de un centro comercial. Ya se imagina la grande que se armó, dada la tradición del rubro y el hecho de ser históricos negocios familiares. La comunidad de tejedoras se movilizó con talleres de tejido gratuitos en el barrio y se organizaron con locatarios y vecinos. Finalmente, la congregación dueña del predio (las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paul) desistieron de vender los locales a la inmobiliaria interesada y se logró preservar este tradicional rincón de la ciudad. * '''Donde Golpea el Monito'''Esta tienda, ubicada en el Nº707 de la calle 21 de Mayo, es una de las sombrererías más antiguas de la capital. La tienda-taller fue fundada por el asturiano José González Noriega y familia en 1915 como '''Fábricas Unidas Americanas de Sombreros'''. Conserva hasta hoy el estilo de tiendas de principio de siglo, con altas repisas, lámparas colgantes, espejos de elaborados marcos, mostradores de atención y dos vitrinas de vidrios biselados. El nombre se debe a una marioneta mecánica parisina que los dueños adquirieron en 1922. Era un pequeño muñeco vestido de “botones”, que golpea con su bastón el vidrio del escaparate. Al parecer representaba una figura afroamericana, lo que explicaría el grueso de sus labios y sus orejas. Ya se ve, en esa época la sensibilidad racial no estaba de moda. El personaje fue toda una novedad y rasgo distintivo del barrio. La gente comenzó a referirse al lugar como aquel “donde golpea el monito”. En una maniobra publicitaria, la tienda fue redenominada a '''Aquí Golpea el Monito'''", que más tarde derivó a '''Donde Golpea el Monito'''. La tienda se jacta de una inimaginable variedad de sombreros. Se mide la cabeza del cliente, y rápidamente los vendedores se dejan caer como moscas a la miel, con un sombrero o gorro a la medida exacta. A esto se suman vestimentas de tipo folclórico, como mantas huasas, cinturones, ponchos, suspensores, etc. {{dato|Hay también artículos para proyectos fílmicos o históricos. Es posible encontrar quepis de la Guerra del pacífico (el actor y director '''Kevin Costner''' se llevó varios después de una visita a Chile) y sombreros tipo vaquero, entre otros.}} '''Donde Golpea el Monito''' está a cargo de la cuarta generación de la familia fundadora. El conserje mecánico luce ya destartalado; su mano golpeadora está fracturada y torcida. Sin embargo, sigue funcionando, y es engalanado según la época: es vestido de huaso en fiestas patrias, o de viejo pascuero en Navidad. La tienda casi cumple cien años, y el monito más de 80, aún descolocando a los paseantes del sector (salvo a los que van premunidos de la reseña de Wikiexplora).{{en ruta|En el puente más cercano a la estación operaba a principios de la década de 1960 un tortillero que acostumbraba pagar a jóvenes desesperados por plata a cambio de ciertos servicios íntimos. Uno de ellos, abatido por el arrepentimiento y el asco, no pudo más y lo mató. El cadáver permaneció varios días hasta que fue encontrado en estado de putrefacción. Cuando un periodista preguntó a un vecino cómo no les había llamado la atención la pestilencia, respondió: "Es que era el mismo olor que salía cuando hacía las tortillas ¿No ve que les echaba grasa de caballo?"}} ===Estación 2: Plazoleta de Santo Domingo==Descripción =[[File:PosadaStoDomingo_EduardoSecchi.jpg|thumb|Posada de Santo Domingo. Fotografía de Eduardo Secchi]][[File:PlazaStoDomingo1952_EducarChile.jpg|thumb|Plaza de Santo Domingo en 1952. Fuente: EducarChile]]La pequeña plazoleta de la calle 21 de Mayo esquina Santo Domingo, guarda una historia mucho más interesante de lo que se podría conjeturar a primera vista. Fue uno de los primeros puntos precisados en el mapa del campamento semi-militar establecido en el siglo XVI, que hoy conocemos como Santiago. En 1565 se estableció en este sitio uno de los compañeros de expedición de '''Pedro de Valdivia''', '''don Juan Hurtado''', quien construyó una casa en el sitio de la plazuela, frente a la cual se instaló ''circa'' 1552 el convento de los frailes dominicos. La casona fue luego traspasada a su yerno, '''Andrés Hernández de la Serna'''. Durante la Colonia y la República, funcionó en el lugar la histórica '''Posada de Santo Domingo'''. La casona fue reconstruida múltiples veces, debido a los terremotos y a la inundación de 1783, una de las varias veces en que el Mapocho se desbordó sobre la ciudad. Es tras este último evento que se edificó el edificio tal y como aparece en las fotografías de archivo. Durante la reconquista española (1814-1817), las fondas y casas de jolgorio cerraron de súbito, ante el miedo a la represión de las autoridades realistas. Solo la Posada de Santo Domingo se mantuvo abierta, recibiendo a los patriotas que oraban por el país en la vecina iglesia y luego entraban al establecimiento. Tras la independencia, la casa volvió a ser sede de grandes celebraciones, centro de recreación y hospedaje. {{dato|La Posada de Santo Domingo es mencionada por '''Alberto Blest Gana''' en su novela ''Martín Rivas''. Es donde el protagonista se aloja en Santiago.}} Lentamente la posada fue decayendo, y alrededor de los 1900 derivó en taller industrial, además de locales comerciales. El conjunto existió hasta 1931, cuando finalmente fue demolido para construir una pequeña explanada que sirviera como plaza para la iglesia. Posteriormente con la instalación del tranvía, se ensanchó la calle de Santo Domingo, y se adoquinó la plaza. Se instaló una fuente de agua decorada con niños con aspecto de querubines, fue fundida en la compañía francesa '''J.J Ducel et fils''', una antigua firma de metalurgia artística. La pieza posee características clásicas y renacentistas francesas. A sus pies se lee ''J.J Ducel, maître de forges à Paris''. {{dato|La fuente de la Plazuela de Santo Domingo tiene un doble en Francia. En la Plaza de la '''Iglesia de Saint-Benoît''' existe una exactamente igual. El modelo nunca fue un diseño exclusivo para el país.}} Actualmente, el lugar es conocido por sus locales de comida rápida y comerciales, además de su ubicación frente a la Iglesia de Santo Domingo. Posee asientos de roca, por lo que pueden verse trabajadores del centro descansando al horario de almuerzo, a la sombra de los edificios aledaños. Por las noches vagabundos suelen dormir allí, además de ser usada para transacciones medias turbias y prostitución. Pese a todo esto, sigue siendo un rincón de enorme valor histórico para la ciudad. ===Estación 3: Iglesia de Santo Domingo==={{Iglesia de Santo Domingo}} ===Estación 4: Calle Rosas===[[File:Mapocho11.jpg|thumb|Fachada del "''Pasaje Rosas''", en calle Rosas.]]Esta calle debe su nombre a un ''beaterío''. Alrededor de 1680 un grupos de mujeres piadosas reunidas en oración eran apodadas ''rosas''. Su lugar de residencia era, por tanto, conocido como la ''Calle de las Rosas''. El beaterío dio origen a un monasterio en 1754, cuando llegaron del monasterio de '''Santa Rosa de Lima''', monjas dominicas. A principios del siglo XX, producto de un fraude, la comunidad perdió su casa, y finalmente se establecieron en la comuna de las Las Condes. Es desde ese momento que comienza a modificarse el uso de los predios, hasta llegar al uso comercial que se conoce hoy. Desde hace varias décadas, esta calle es conocida como el distrito de las manualidades de Santiago. Se pueden encontrar botonerías, bisutería, pintura, librerías, papelerías, encintados, telas y bordado, entre otros. Desde la calle se puede acceder a las Galerías Las Rosas (más conocida como la de los botones) y Las Flores, que cobijan una multiplicidad de pequeñas tiendas en su interior. Un paraíso para cachurear. '''Horario:'''* Lunes a Viernes: 10:00 - 19:00hrs* Sábado: 10:00 - 15:00hrs{{salto}} ===Estación 5: Mercado Central===[[Archivo:MercadoCentral.jpg|1000px|center]] El '''Mercado Central''' concentran 241 locales de casi cualquier cosa que termine en "ía": marisquerías, pescaderías, fruterías, yerberías, carnicerías, botillerías, fiambrerías, panaderías y queserías. Para dar variablidad fonética hay también farmacias, una joyería, y restaurantes. Estos últimos son reconocidos por sus recetas tradicionales criollas. Entre las especialidades destacan platos típicos basados en productos del mar, como el mariscal, la paila marina y el pescado frito. Un lugar clave del patrimonio culinario chileno (y de quienes necesitan de un lugar abierto al amanecer para pasar la resaca). La manzana donde se encuentra emplazado fue durante la colonia una cancha de desperdicios llamada ''Basural de los Domínicos''. De hecho, se escogió como lugar para edificar el [[Barrio_Cívico#Estaci.C3.B3n_2:_Palacio_La_Moneda|Palacio de La Moneda]] hasta que descubrieron que los siglos de desechos habían vuelto del terreno un flan. Es por orden de Bernardo O’Higgins en 1817 que el terreno fue limpiado y acondicionado para trasladar al mercado original de la [[Plaza de Armas]], debido al desorden y suciedad que los vendedores generaban en el sector. La explanada fue destruida en un incendio en 1864, lo que condujo a las autoridades a levantar un proyecto definitivo: la '''Plaza de Abastos de Santiago'''. El nuevo proyecto consistía en dos partes: una plaza interior, diseñada por el arquitecto '''Manuel Aldunate''', y el diseño del edificio que la contenía, por '''Edward Woods''' y '''Charles Henry Driver'''. El edificio fue proyectado en base a hierro y acero, recientemente introducidos en el país. Así, se define un núcleo central techado, con una compleja armazón metálica -forjada en el Reino Unido- y sustentada en albañilería de ladrillo y arcos de medio punto, que permitía el ingreso de luz interior y un sistema de ventilación cruzada. Definía en su centro un cuadrilátero con una fuente de agua. {{fijarse|En la arquitectura de hierro forjado destacan los adornos de los pilares y arcos, y sus puertas de hierro fundido, decoradas con motivos de hojas y tallos entrelazados.}} En 1868 comenzaron las obras a cargo del arquitecto '''Fermín Vivaceta''' y el contratista '''Juan Stefani'''. Fue inaugurado el año 1872 por el presidente '''Federico Errázuriz Zañartu'''. Se lo consideró en el momento como uno de los edificios públicos más hermosos, por su escala, uso y aplicación tecnológica. En 1884, la Municipalidad inició la construcción de un anillo perimetral con nuevos locales, siguiendo la línea de edificación de la manzana. En ese anillo se encuentran los locales de pescados y mariscos. Alrededor del 1900 se instaló luz eléctrica, servicios higiénicos y lavadores para las pescaderías. Entre 1927 y 1930 se demolió el frente norte del segundo anillo, según la ley de canalización del Mapocho. En 1983, se llevó a cabo una restauración general del edificio, y fue declarado Monumento Nacional el año siguiente. En 1990 fue vendido por la Municipalidad a los locatarios, quienes organizaron una copropiedad obligada a respetar el estatus de Monumento Nacional, estatus que demanda especial cuidado con el mantenimiento, uso e intervenciones. En 2004 el entorno del Mercado Central fue intervenido a fin de realzar su valor patrimonial y revitalizar la vida urbana del sector. {{dato|El Mercado Central fue declarado en 2012 como uno de los ''Mejores Cinco Mercados del Mundo'' según '''National Geographic'''}} {{en ruta|* No se pierda las empanadas chilenas del '''Emporio Zunino''', fábrica de dos hermanos inmigrantes italianos que data de 1930, ubicada en la esquina suroeste del mercado (Puente 801). Han sido ya varias veces premiadas por el Círculo de Cronistas Gastronómicos de Chile con el galardón de las “5 mejores empanadas chilenas”. Encontrar un espacio en la barra en la hora de almuerzo es toda una hazaña, pero vale toda la sangre, sudor y lágrimas. También se puede dañar al hígado con pastas y quesos. * La '''Tostaduría Puerto Rico''' es la más antigua de Santiago, con más de 90 años de funcionamiento. Deléitese con una amplia variedad de hierbas, condimentos, té, café, mate y frutos secos, entre otros.}} '''Horario:'''* Lunes a Jueves: 06:00 - 17:00hrs* Viernes: 06:00 - 20:00hrs* Sábado: 06:00 - 18:00hrs* Domingo: 06:00 - 17:00hrs ===Estación 6: La Piojera===[[File:CalleAillavilú60_RevistaEnViaje_CarretajuntoaPiojera.jpg|thumb|Calle Aillavilú el año '60. Se aprecia una carreta detenida delante de La Piojera]][[File:LaPiojera63_EnViaje.jpg|thumb|Fotografía de La Piojera el año '63. Fuente: Revista En Viaje]][[File:Mapocho7.jpg|thumb|Fachada actual de La Piojera]][[File:Piojera_SantiagoTurismo.jpg|thumb|Fotografía interior del local. Fuente: SantiagoTurismo]]Este afamado local de Aillavilú 1030 se ha establecido como la tradicional chichería-restaurante de Barrio Mapocho. Sus dueños, la familia Benedetti, lo ha conservado por más de tres generaciones.Dentro de este tugurio hay tragos y comida criolla, y un ''look' que pareciera extractado de una ramada o chingana, con banderas y escarapelas patriotas entre pipas y barriles, así como letreros pintados a mano. En años recientes se volvió un atractivo turístico y buque insignia de la puesta en valor de la ''cultura guachaca'', con lo que cambió el público y sus características originales de ''picada'' tipo antro. {{dato|La palabra guachaca, de raíz quechua proviene de ''huachaca'', que eran cierto tipo de mendigos y ebrios callejeros, que caían en la vagancia consumidos por el vicio. Se cree que tiene relación también con las expresiones ''huacho'', usado peyorativamente para huérfano o bastardo, y también con el ''huachacai'', una bebida similar al aguardiente pero de pésima calidad, que se bebía en lo más bajo de la sociedad chilena, común en La Chimba, La Vega y el Mercado Central, territorio de curados.}} La historia del establecimiento esta fuertemente enlazada a la de la calle Aillavilú, llamada antiguamente "''Calle de Zañartu''" porque en el siglo XVIII precisamente frente a la chichería se emplazaba la casa de vigilancia de las obras del Puente de Cal y Canto del corregidor '''Luis Manuel de Zañartu'''. {{cita|Pasada la calle de San Pablo, frente al Mercado Central, se alzaba solitario, con aspecto de ruina romana, un alto y grueso muro de cal y ladrillo, de unos cincuenta metros de largo. Nacía bajo, casi a ras de suelo, junto a una calleja oblicua, e iba a rematar su reciedumbre de unos diez metros de altura muy cerca de las márgenes del Mapocho. La calleja se llamaba Zañartu. ¿Fue acaso en homenaje al famoso Corregidor?, y estaba compuesta por sucios bodegones en cuyas murallas se leía: ¡¡¡Llegó la rica chicha de Quilicura!!!... ¡¡¡Aquí se vende la auténtica rubia de Curacaví!!!|'''Lautaro García'''. Novelario del 900.}} No hay cómo saber si este local sería el que después ocupase la piojera, pero da a entender que esta calle desde sus inicios fue dominada por los bares y cantinas, además de casas de remolienda. '''Oreste Plath''' en ''El Santiago que se Fue'' indica que los orígenes de la cantina se remontan a la Guerra del Pacífico, y que el restaurante actual nace hacia 1916, sobre un boliche que ya llevaba 60 años de vida. La versión más aceptada sobre el nombre del local, y que es la que registra [http://www.lapiojera.cl/ la web oficial del tugurio], remite a un berriche del presidente '''Arturo Alessandri Palma'''. En 1922, al ser llevado a ese local tras una ceremonia en la Escuela de Detectives rugió iracundo apenas entró ''¡¡Y a esta piojera me trajeron!''. Otra versión sugiere que ''en la chichería picaban piojos grandes y chicos'' El trago más famoso del local es el ''terremoto'', copete nacional extraoficial. Esta bomba gastrointestinal está conformada por vino pipeño, helado de piña, fernet o granadina. A esto se ha sumado la versión con menta o ''maremoto''. Antes del ''boom'' del terremoto y sus variedades, se vendían vinos y chichas de San Javier, así como pipeños blancos, borgoñas, colas de mono y ponches de culén. Esta última, tradicional bebida campesina muy popular en las picadas de barrio de los mercados santiaguinos. Por muchos años los locales del barrio no poseían cocinerías propias, por lo que el callejón se llenaba de comerciantes que ofrecían tortillas, pequenes, pan amasado y huevos duros. Otra opción era comprar mariscos en el Mercado Central, y llevarlos al local para desconcharlos y comerlos con limón. Posteriormente '''La Piojera''' incorporaría una cocinería, por lo que hoy abundan en el menú preparaciones como el pernil, prietas y longanizas, huevos duros, empanadas de horno y bifes a lo pobre. Además de Alessandri Palma, otros jefes de estado pasaron por el lugar, como '''Juan Antonio Ríos, Eduardo Frei Montalva, Salvador Allende Gossens''' y '''Eduardo Frei Ruiz-Tagle'''. A esa lista se suman el cantante de ópera '''Ramón Vinay''', el pintor '''Arturo Pacheco Altamirano''', el escritor '''Francisco Coloane''', y diversos clubes como la Hermandad de los Patos, conjuntos musicales y agrupaciones deportivas. Estas visitas están capturadas en fotografías que decoran el muro tras la barra. La Piojera ha logrado sobrevivir pese a los cambios de su entorno y al acoso de proyectos inmobiliarios. Tal fue el caso del intento de cierre en 2003, para demolerlo y construir un centro comercial. El piojicidio fue repelido por las organizaciones vecinales y los dueños. En ese momento el '''Movimiento Guachaca''', en una parodia a Monumentos Históricos Nacionales tituló al sitio como ''Monumento de los Sentimientos de la Nación'' {{dato|La Piojera mantiene una disputa sobre la creación del terremoto con el famoso bar '''El Hoyo''' de Estación Central. La disputa llegó incluso a un enfrentamiento legal por los derechos de propiedad intelectual. De acuerdo a una versión difícil de comprobar pero jamás desmentida, fue en la estela del terremoto de 1985 que periodistas alemanes que reporteaban el lío pidieron el trago en El Hoyo. Uno de ellos lo bebió con tal prisa que al ponerse de pie se mareó y exclamó. "¡Esto sí que es un terremoto!". Lo que sí está claro es que no fue inventado en esa ocasión, pues hay registros previos.}} {{fijarse|La fachada luce un ángulo en relación a la calzada distinto al de otros inmuebles de la cuadra. Esto se debe al cambio de forma de la calle Aillavilú, que '''originalmente tenía distinto ángulo'''}} ===Estación 7: Ex - Hotel Bristol==={{Ex Hotel Bristol}} ===Estación 18: Cité CienfuegosFantasma de la Ex-Garita Mapocho===[[File:GaritaMapocho_Chilectra.jpg|thumb|Fotografía de la Garita. Fuente: Archivo Chilectra]][[File:Tranvias1930.jpg|thumb|Fotografía de un tranvía por calle Puente, en 1930.]]Esta estación no existe ya más. Cierre los ojos e imagine... ¡Pero no todavía, pedazo de bruto! Lee el texto primero. En la época en la que el tranvía atravesaba el río Mapocho por el puente de los Carros, la estación era un punto central en el intercambio de pasajeros. La '''Compañía de Ferrocarril Urbano''' estableció corrales y talleres para sus tranvías. En la plaza, de cara a la imponente fachada de la estación, se hizo instalar una casa techada que se volvió símbolo del barrio: la '''Garita Mapocho'''. Era una especie de cobertizo con kiosko interior para informaciones. Los pasajeros esperaban aquí los tranvías, que seguían por avenida Cardenal Caro o hacia la Chimba. Alrededor del paradero carteles luminosos anunciaban: ''Venga, tome aquí su tranvía''. '''Juan Luis Espejo''' en sus ''Relatos del Santiago de Entonces'' narra la existencia de un enorme cartel de neón con una langosta promocionando el restaurant “El Martini”, de calle Bandera. Se vendían cervezas, bocadillos y hot dogs al paso, la versión de la época de los chocolates y helados que sazonan el transporte público hoy. La garita comenzó a deteriorarse pasada la edad dorada del tranvía, incapaz de enfrentarse a la locomoción movida por motores. La convivencia con los autos la volvió un punto peligroso para los pasajeros. Acabó retirada a mediados de siglo. Por desgracia no existe huella alguna de su ajetreada presencia, ni de la vida que se generó en torno a ella.{{salto}} ===Estación 9: Estación Mapocho==={{Estación Mapocho}} '''Posible extensión de la ruta''': Antes de seguir al Puente Cal y Canto, puedes caminar dos cuadras hacia el sur hasta Teatinos 765, donde está la curiosa '''Capilla de Ánimas'''. Es administrada por la Cofradía del Sagrado Corazón de Jesús, compuesta tanto por vivos como por difuntos.{{salto}} ===Estación 10: Ex - Puente de Cal y Canto===[[File:Calicanto1870.jpg|thumb|Fotografía del Puente en 1870. Fuente: EnTerreno]][[File:Calicanto1875_RamonSubercaseaux.jpg|thumb|Pintura de la vida sobre el Puente, en 1875. Obra de Ramon Subercaseaux]][[File:DemolicionCalicanto.jpg|thumb|Fotografías de la demolición del Puente.]]El puente de Calicanto, o de Cal y Canto, fue un puente construído sobre el río Mapocho, con la finalidad de conectar ambas laderas e integrar el sector de La Chimba (ladera norte, actuales comunas de Recoleta e Independencia) a la ciudad de forma segura, ya que los puentes anteriormente construidos (uno de cal y ladrillo, y otro de madera) fueron destruidos con las crecidas del río. Obra del corregidor '''Luis Manuel de Zañartu''', es considerada una de las mayoras obras arquitectónicas en la historia de Santiago, y fue un símbolo y paseo de esta hasta su demolición.
==Recomendaciones y posible extensión de la ruta==
* Evitar permanecer hasta muy tarde, en especial si se está solo.* Si hay ánimos, se puede continuar con la ruta de '''[[Independencia]]''', o '''[[Iglesias de Recoleta y sector La Chimba]]'''
==Bibliografía y Agradecimientos==