[[File:El Manchado.jpg|200px|thumb|Restaurante "El Manchado" en funcionamiento desde 1920.]]La instalación del Matadero Franklin en 1847 estableció al barrio como un importante polo comercial y de abastecimiento en el sector sur de la capital. Debido al aumento de demanda de carnes, en 1912 se decidió modernizar el matadero a manos de los arquitectos '''Hermógenes del Canto''' y '''Alberto Schade'''. Esto creó la base para la posterior instalación del '''Mercado Franklin''', una aglomeración de locales pareados al costado norte del matadero. Estos recintos solían abocarse a la venta de los productos derivados de matadero, pero hoy también abunda el comercio verduras, frutas y abarrotes, que en conjunto hacen de la calle Franklin una de las mayores vías comerciales del barrio. Al emplazarse dentro de una zona de conservación histórica aún se conservan gran parte de sus pabellones e infraestructura de hormigón armado. Solo ha variando su uso, migrando desde el almacenamiento de ganado a un comercio variado.

'''* Antiguo acceso hacia el Matadero:''' En el tramo de la ruta hacia la calle Franklin, en la acera oriente, entre las carnicerías y locales de abarrotes, aparece un umbral que se ha mantenido allí desde 1847. Éste es uno de los pocos vestigios que sobrevivieron a la remodelación de 1912 y el cierre del matadero en la segunda mitad del siglo XX.